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En la entrada inmediata
anterior de esta Imprenta de Benjamín,
se mencionó esto:
“…Steven Smith, miembro de la West Essex Round Table Lodge, Num. 9310
dice en un excelente articulo de Freemasonry Today del 14 de diciembre de 2011,
que la vida de Sayer no ha sido muy estudiada porque no se correspondía con los
patrones de nobleza que la francmasonería hubiera deseado exhibir y que aún pudiera ser que Sayer tuviese un
origen extranjero ( francés?)....”
Aquí presentamos ese artículo.
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Título original: back to basics. Revista Freemasonry Today,
diciembre de 2011.
http://www.freemasonrytoday.com/features/itemlist/tag/Steven
Smith.
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Anthony Sayer puede haber sido
elegido como el primer Gran Maestre de la Gran Logia en 1717, pero muy poco se
conoce acerca de su vida. Steven Smith se pregunta porqué y se asombra de que
los historiadores deliberadamente le hayan ignorado.(Steven Smith es miembro de
la West Essex Round Table Lodge, No. 9310)
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Dice el autor:
Casi nada se sabe acerca de
Anthony Sayer por la sencilla razón de que poco se ha investigado acerca del
primer Gran Maestre. Una explicación podría ser que se le tuviera como una
persona común y de baja posición social y por lo tanto no se consideró lo
suficientemente importante como para estudiarle.
Sin embargo este enfoque choca
contra la esencia misma de la francmasonería donde todos somos hermanos e
iguales.
Anthony Sayer fue electo como primer
Gran Maestre por una mayoría de manos alzadas de los miembros de las cuatro
logias (algunos dicen que eran seis logias y otros agregan algún antiguo
hermano “ libre”) que se reunieron en la taberna del Ganso y la Parrilla en
St.Paul´s Church Yard el 24 de junio de 1717. Las logias previamente habían
tenido una reunión en la Tree Tavern, de Covent Garden en 1716 y
habían acordado reunirse en Gran Logia.
El Dr. James Anderson en las
primeras Constituciones de 1723 anota que en esa reunión se resolvió que se
elegiría un Gran Maestre de entre ellos “hasta
que tuvieran el honor de tener a un noble a su cabeza”.
Anderson se refiere a Sayer como
a “ Mr. Anthony Sayer, Gentleman”. La carencia de más información acerca de
quién era y a qué se dedicaba ha dado lugar a las especulaciones de quienes
sospechan que Sayer no contaba con medios financieros. Y ciertamente se ha
sugerido que al no ser una persona con algún contacto con la aristocracia, por
tanto debía de ser de baja posición social.
Caída en el descrédito
Todo el asunto ha quedado
empañado por el hecho de que Sayer efectivamente tuvo que solicitar asistencia
caritativa a la Gran Logia. Y esto quedó registrado en un cierto número de
ocasiones en las actas de la Gran Logia, así como en qué medida fue asistido en
algunas ocasiones. Las razones de Sayer para solicitar asistencia no se conocen
pero puede ser que sencillamente hubiera quedado atrapado en el rayo mas bajo
de la rueda de la fortuna.
Está también registrado que se le
acusó de prácticas clandestinas e irregulares en relación al Oficio aunque mas
adelante se pudo constatar que sus acciones no eran más que irregulares por lo
que fue debidamente amonestado.
Sayer acabó trabajando como Tyler
( cubridor) de su logia hasta su muerte, después de haber dejado el sitial de Gran Maestre y en el
interín fue también Primer Gran Vigilante y Vigilante de su propia logia.
Esto se ha considerado como un descrédito,
en opinión de algunos comentaristas, con otros detractores que afirman que fue
un “ nadie”, incapaz de sostener su
posición en el Oficio, y que en efecto fue superado por quienes eran mas nuevos
que él.
La otra cara de la moneda
Si todos esos hechos son
interpretados en el verdadero espíritu de la francmasonería, con una mente
abierta y caritativa, el punto de vista contrario también puede ser cierto.
Puede argumentarse que Sayer se
mantenía en tan alta estima entre sus hermanos y compañeros que fue electo por
la mayoría de los hermanos presentes como la mejor persona para ese trabajo.
Y al menos, si ese no hubiera
sido el caso, puede decirse que amablemente se ofreció para lo que
indudablemente fue un rol importante y difícil, supervisando el nuevo concepto
de unir y colocar todas las logias bajo
un mismo paraguas-un concepto que ha sobrevivido a la caída de poderosos
imperios y a la destrucción por efecto
del tiempo.
Otro punto a considerar es la
humildad de Sayer. Cuando tuvo la necesidad de asistencia, no dudó en
solicitarla. De la misma forma, no se sintió menoscabado en trabajar en el
puesto de Tyler, cuando antes había sido Gran Maestre.
Su desgracia no lo hizo apartarse
del Oficio y bien podría decirse que Sayer debería ser tomado como un modelo para la francmasonería actual.
Cuando dejó esta vida por la Gran
Logia superior, a fines de 1741, Sayer fue sepultado en la Iglesia de St. Paul,
Covent Garden, en enero de 1742.
Una prueba posterior de la estima
en la cual era mantenido por sus pares es el artículo registrado por un
periódico contemporáneo que consignó:
“ Hace pocos días falleció a los 70 años Mr. Anthony Sayer, quien fuera
Gran Maestre de la Mas Antigua y Honorable Sociedad de los masones Libres y
Aceptados en 1717. Su ataúd fue seguido por un gran número de gentlemen de la mejor calidad de esa Honorable
Sociedad, desde la taberna Shakespears Head en la Piazza de Covent Garden y
decentemente enterrado en la iglesia de Covent Garden.”
Puede haber algunas razones para
que el linaje de Sayer no se haya podido trazar y una no menos importante es que como los registros de la época no han
sobrevivido, obliga a los investigadores a considerar esto como un punto
muerto.
Con todo, puede deducirse que si
bien el nombre de familia , “Sayer”,
era bastante común en el sud de Inglaterra para esa época, el de bautismo
cristiano “Anthony” lo era menos y
hasta podría considerarse como mas continental en sabor.
Podría haber sucedido
perfectamente que Sayer no hubiera nacido en Inglaterra. Muchas personas de
aquellos tiempos eran inmigrantes que al radicarse allí cambiaban sus nombres.
Y es notable que al menos dos personas que
están enterradas en la iglesia de St. Paul estaban dentro de esa categoría: Grinling Gibbons( 1648-1721) y Sir Peter Lely ( 1618-1680=.
Gibbons, un famoso escultor de
madera nació y se educó en Holanda en tanto que Sir Peter Lely nació en Holanda
donde originariamente se llamaba Pieter
van der Faes y fue el retratista de
la corte de Carlos II
Ambas personas habían llegado a naturalizarse
como ciudadanos de Inglaterra y ambos eran consumados artesanos. Gibbons
aparece en un retrato pintado por Sir Gorfrey Kneller ( 1646-1723) sosteniendo
un par de compases y contemplando las proporciones de un busto clásico que
representa la muerte.
Seguramente que hay otros hechos
que pueden descubrirse acerca de Sayer. Quizás los investigadores puedan dar
acerca de él una mirada profunda en el curso de la historia europea antes de confinarlo a la historia masónica.
Quizás necesitemos comenzar otra
vez con los hechos que tenemos y volver a considerarlos con mente abierta y a
una nueva luz; por caminos de investigación que todavía no se han recorrido.
Ese enfoque podría eventualmente
descubrir el verdadero “ Mr.
Anthony Sayer, gentleman”, que en los ya cercanos 300 años de la Gran
Logia, quizás sea lo que mas ha perdurado.
Más importante, es que no
olvidemos los valores que debemos sostener como parte de nuestro Oficio y
recordar cuales son las verdaderas razones para ser un masón.
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