domingo, 19 de febrero de 2012

Noaquitas: masones y carpinteros. Parte II.

Próxima entrada de la Imprenta de Benjamín, jueves 1 de marzo.
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prosigue diciendo el autor:


La primera de esa es la historia nuevamente relatada por Anderson en sus Constituciones de 1722, de la preservación de las Siete Artes y Ciencias Liberales de la humanidad por la creación y protección de los dos grandes pilares que vinculaban a Adán, pasando por Lamech, con Hermes y el período posterior al Diluvio.
Pienso que será de ayuda repasar algunas de esas historias tal como fueron primeramente contadas:

Lamech… tuvo dos esposas, una llamada Ada y la otra Zilla; con Ada tuvo dos hijos, Jabal y Jubal; con Zilia uno llamado Tubalcain y una hija, Naamah.
Esos cuatro niños fueron los iniciadores de todos los oficios en el mundo… Tubalcain fundó el oficio del hierro, oro, cobre plata y acero. Y esos niños grabaron esas ciencias que habían fundado en dos pilares de piedra que podrían ser reencontrados después que Dios tomara venganza; uno era de mármol que no podía quemarse, y el otro de un material al que no lo afectaría estar sumergido en Agua…

Inmediatamente se nota una diferencia en las sustancias de la cual están formados los pilares por la introducción del término “piedra” obviamente destinado a reclamar a los masones de la piedra como mas relevantes.

La leyenda pasó a través de muchas variaciones, pero finalmente quedó consagrada en la forma en que se expone usualmente en nuestro Segundo Grado donde se lee:
“ Esos pilares estaban huecos, para servir como archivos de la masonería y donde se depositaron los rollos de las Constituciones. Eran de bronce.
También debe notarse que retenemos como palabra de pase desde el Segundo Grado a  Tubalcain” que crea un vínculo con las antiguas tradiciones y enfatiza el sitio de los otros oficios dentro de la masonería.
La segunda leyenda está referida a la anterior puesto que se basa en la de Noe y sus descendientes en la preservación de los “verdaderos secretos” del oficio.
Siguiendo con el pasaje citado antes acerca de Noe en las Constituciones de 1723, leemos “ que Noé y sus hijos los comunicaron ( Artes y Ciencias) a su descendencia. Por cerca de 101 años después del Diluvio hallamos un vasto número de descendientes de la raza de Noé, en el valle de Shinar… que mas adelante fueron conocidos como Caldeos y Magos, que preservaron la buena Ciencia, Geometría que los Grandes Reyes y grandes Hombres aplicaron al Arte Real.  Pero no podemos hablar mas de los conveniente excepto en una logia constituída….”

Esta sentencia en negrita, indica que no estamos en presencia de una forma sencilla de un registro histórico sino con una parte de lo que se llama “ritual” en forma de palabras empleadas en ceremonias de logia.
Y precisamente por esto nos encontramos cautivos de esa actividad masónica, el ritual, que identifica y distingue a la francmasonería de otras formas de asociaciones sociales o de intercambio, y que necesitamos re- examinar un documento ritual conocido que no solo arroja luz sobre la historia de Noe y sus hijos, sino que los liga a practicas muy similares que han sido desde el siglo 18  la principal característica de lo que llamamos  Masonería Libre y Aceptada”.
El documento es el Manuscrito Graham con fecha ambiguamente registrada como siendo de 1726 o de 1672.
No existe una conclusión firme de la datación correcta, pero del examen calificado y experto de la escritura del documento original, se puede aceptar que proviene del siglo 17 y que 1726 sería la fecha en que habría sido copiado.

El H. Herbert Pool, quien primeramente dirigió la atención del mundo masónico al Manuscrito Graham., presentaba su opinión de que la historia de Noé era ya conocida al oficio “ en su mas amplia forma al menos 21 años antes de la formación de la (primera) Gran Logia”. Esto lo haría contemporáneo del periodo en el cual algunas de nuestras prácticas especulativas masónicas se estaban formando.

Lo que es de especial interés es que esta forma de “historia ritual” fue discontinuada, olvidada o suprimida y que solo volvió a emerger, aparentemente por casualidad, hace unos 50 años.
¿Porqué sucedió en 1937? Es un asunto intrigante que por el momento no es de
relevancia en  nuestro estudio actual.
Lo que sí es de relevancia es el hecho de que tenemos aquí la historia de Noé, el guardián de los secretos de las siete Artes y Ciencias Liberales, declarando que el descubrimiento de tales secretos solo puede suceder cuando hay tres presentes ( una  triple voz), pero muriendo antes que revelarlos…..
 Sus hijos realizan un intento por levantarlo, y con F.P.O.F, tal que los secretos en su tumba puedan ser descubiertos, pero sin éxito y la búsqueda para el objetivo deseado deberá hacerse por otros medios.
La cercanía de ese relato al subsiguiente “ ritual” del tercer grado no puede ser ignorada y dado que no contamos con algún otro material existente que explique de donde proviene la leyenda de Hiram, posterior a 1726, conviene investigar los posibles vínculos entre el manuscrito Graham. y su contraparte.
Si todo lo que he dicho en la primera parte de este trabajo tienen alguna viabilidad, entonces debería existir un lugar perfectamente natural para una historia basada en las Escrituras y referida a Noé, sus hijos, su “herencia secreta” y un modo de revelar y transmitir esa herencia para que llegara a ser parte de las primeras prácticas masónicas.
Y no solo debería ser lo mas plausible, sino lo mas probable.
Cuando, por otra parte, hallamos que aún tan tardíamente como 1738 otra edición de las Constituciones de la Gran Logia tienen una referencia directa a los masones como Noaquitas, o “Hijos de Noe”, debe reconocerse que esa forma de denominar a la nueva forma de Oficio Especulativo  era normal y aceptable.
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Aunque mas adelante referiré qué mas puede decirse de este término “Noaquita”, su persistencia en esa fecha significa que por lo menos hasta ese momento había algún tipo de asociación entre “ Masones” en el sentido amplio y la historia o leyenda de Noe.
El Manuscrito Graham le da forma y realidad a esa asociación.
Mientras que sería excesivo citar en toda su extensión esa fuente masónica y el texto completo de AQC (1967), podría ser útil considerar brevemente el estilo del documento y hacer tres comentarios acerca del contenido principal que tenga alguna relevancia para este trabajo.
Aparenta ser un documento para uso en una logia antes que una producción literaria para estudio privado. Tiene obvias vinculaciones con los llamados Old Charges, y se han hecho comentarios en 1967 ( AQC 80.p100).

Harry Carr escribió:
Parece probable que la colección de leyendas Graham fueran de una tradición heredada y no la invención de quien llas transcribió….
Colectivamente (como en los Old Charges) parecen presentar una historia separada de la tradición originalmente desconectada de practicas rituales, pero disponibles para ser adoptadas en algún ritual cuando surgiese la necesidad o se ofreciese la oportunidad.
Debe notarse que ni Harry Carr ni nadie en 1967 podía sugerir de donde provenían esas tradiciones. Sin embargo que esas leyendas puedan haberse comenzado a usar en el ritual se confirmaría en la introducción al manuscrito, que pretende que la persona que se beneficiaría con sus contenidos era un Free and Accepted Mason de buena fe.
Cito:
El saludo es como sigue:-  ¿De donde venís?
- Vengo de una muy venerable logia de Maestros y Compañeros…… quienes son todos verdaderos y perfectos hermanos de nuestros sagrados secretos, que os daré si compruebo que sois uno de ellos…….
¿Cómo fuisteis hecho un free- mason… etc
Esas y las subsiguientes preguntas y respuestas, todas en la forma de un primitivo catecismo, subrayan la antiguedad de la forma y contenido de este manuscrito pero sugiere que nos hallamos muy al comienzo de nuestro viaje por el siglo 18.
……………………………….continuará

viernes, 10 de febrero de 2012

Noaquitas: masones y carpinteros. Parte I

Próxima entrada de la Imprenta de Benjamín, el domingo 19 de febrero.
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 Extractado de Cannonbury Masonic Research Center. Febrero de 2000.
Autor: Neville Barker Cryer.
Título original:
Craft and Royal Arch Legends
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Nota del T. En las Constituciones de Anderson, edicion de 1738, se introduce una modificación respecto a la primitiva de 1723: ahora “ un masón estará obligado a obedecer la ley moral.. etc.. como un verdadero Noaquita…….
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Dice el autor del artículo:

La tesis principal de este artículo es fácil de expresar:
El argumento es que al tratar de resolver algunas cuestiones de larga data referidas a nuestro Oficio y al Real Arco, siempre nos hemos limitado a buscar respuestas orientadas a material referido al de la construcción en piedra.
Cuando aceptamos que los Carpinteros y ensambladores, al igual que otros artesanos, también eran considerados como “verdaderos masones”, podemos atisbar nuevas soluciones.
El secreto principal quedará resuelto cuando averiguemos porqué se decía de nosotros, los masones, que éramos  Noaquitas” o “Hijos de Noe”.
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Pero aunque esta tesis es simple de expresar, desentrañarla y llegar a demostrarla puede que no lo sea y eso porque que deben superarse cuatro obstáculos:
Necesitamos una redefinición de términos, como el de “Maestro” o de “Masón”, que han adquirido una identidad que parece como “ hecho de piedra”.

  1. Hay que reconsiderar algunos puntos de vista existentes que pueden verse como fuera del alcance de este debate, por ejemplo las tradiciones anteriores a 1717 son irrelevantes.
  2. Tendremos que admitir algunos hechos novedosos, tales como las pinturas murales Tudor, que aunque parezcan al principio como de interés, pueden ser inapropiadas o innecesarias.
  3. Tenemos que deshacer una madeja deshilachada que desafía los esfuerzos del estudioso mas paciente.
  4. Enfrentando una serie semejante de obstáculos parecería que el mejor curso para adoptar sería retroceder y aceptar la derrota, en tanto que la elección obvia para algún intruso no bienvenido sería dejar todo como está, excepto cuando el premio vale tanto la pena que echa las precauciones al viento y a los perros- ¿ en este caso los críticos?. Creo que esta es una de esas ocasiones.
Es el momento de considerar las seis cuestiones que han estado batiendo a las puertas de cualquier historiador de la masonería inglesa que se respete.

Lo que buscamos es la solución a esos problemas:
¿En qué contribuye el Manuscrito MS. Grahan a nuestra Francmasonería inglesa?
¿Cuál es la base mas probable de la leyenda de Hiram del tercer grado?
¿Qué intentaba decir el Dr. Anderson al hablar de masones Noaquitas?
¿Cuál es el verdadero sitio  del grado de los Marinos del Arca ( Ark Mariner)
¿De dónde proviene el énfasis puesto en Babilonia?
¿Dónde se originó la leyenda de Josías y dónde encaja?

En lo que sigue, adoptaré una línea argumental basada en evidencia que no solo busca responder a las cuestiones planteadas, sino aún más, mostrar que están interrelacionadas.
Comenzaré con una vívida experiencia personal en un aspecto de la arquitectura histórica.
En el verano de 1997, tomé parte en una serie regular de discursos y actividades organizadas por el Canciller de la Catedral de York.
El propósito era revelar al público algunas de las historias y relatos referidos a la edificación de la iglesia. El item que atrapó mas especialmente mi imaginación fue la visita guiada al Minster Chapter House ( Capítulo de la Catedral) incluyendo lo que  se conoce como la Mason´s Chamber ( La Cámara del Masón) incluyendo los andamios de madera que soportan el techo de ese antiguo sitio de reunión.
Al visitar estos lugares se adquiere una impresión permanente- la íntima conexión del oficio de los carpinteros con el de los canteros..
La Mason´s Chamber era la sala donde los diseños para el trabajo en piedra eran dibujados en el suelo por el Maestro Arquitecto y las huellas de algunos de ellos aún se conservan. Pendiendo del techo hay filas sobre filas de plantillas de madera que servían de guía a los talladores de piedra en la tarea de prepararlas para las costillas de las bóvedas y ventanas de tronera , pedestales, cabezas de pilares para crestas y fachadas- y es relevante aquí señalar un término entonces usado para terminar un aguilón- el “chevron”-
Todos esos ítems del arte de los obreros de la piedra dependían para su correcta terminación de los diseños hechos en madera por los carpinteros bajo las instrucciones del maestro Arquitecto.
Se puede imaginar que la sala era una colmena en plena actividad.
Ahora, subiendo por una escala de caracol se alcanza en el último escalón una sala octogonal.
Por encima de la cabeza se tiene un conjunto de grandes vigas de madera en forma cónica dispuestas para encajar en el conjunto que marca el pináculo en el techo del Chapter House, biseladas y recubiertas de láminas de plomo para impermeabilizar y sobre las que se ubican capas de azulejos.
Aquí en una de las exposiciones mas complejas e impresionantes de la carpintería y ensamblado de toda Europa, se puede apreciar el verdadero esqueleto y fundación que permitía que el trabajo de piedra de mas abajo permaneciera seguro, seco y estable.
Y eso no es todo. Desde el mismo ápice del techo desciendo un pilar de madera, como el mástil de un antiguo navío formado con tres largas piezas de madera, ya que con una sola no era posible cubrir tal longitud.
Ese gran bastón de se hunde hasta la base y fundación del edificio, dándole un enorme anclaje. Comprenderán, como no lo han hecho antes, que hay una realidad interior de esta construcción medieval- una unión inseparable de al menos dos oficios para producir esa maravilla del Chapter House de Cork: Los masones y carpinteros trabajaron mano a mano.

Y debido a que con frecuencia olvidamos esa colaboración en el periodo operativo de esos oficios es que puede asombrar que nuestros ancestros no hayan cometido el mismo error.
Un memorando de Dublín, de 1797 habla de: “..nosotros, la compañía de carpinteros, masones, ensambladores …..” o “que la comprobación de la altura de una pared de la Torre de Londres, se realizó en presencia de William Ransey, Jefe masón y de William de Hurley, Jefe carpintero.

Y es precisamente esa clase de interrelación la que se refleja en las Constituciones de la primera Gran Logia de los Libres y Aceptados Masones o masones especulativos de Londres y Westminster en 1722-23, compiladas por el celebrado Dr. James Anderson.
Allí primeramente expresa:
“.. Jabal descubrió la Geometría y dividió los rebaños de ovejas y las tierra; fue el primero que edifico una mansión de Piedra y Madera….. y fue un Rey llamado Hiram quien porque amaba al Rey Salomón,  le dio madera para su obra.”
Así es que en ningún caso se pierde la inferencia de que no solo los trabajadores de “ la  piedra” podían considerarse “ masones”. Anderson agregó este pasaje el año siguiente:”…los masones sobre todos los otros artistas, eran los favoritos del Eminente y se hicieron imprescindibles por sus grandes conocimientos de toda suerte de materiales, no solo piedra, ladrillo, madera, encalado sino también en telas y sedas usadas para las tiendas como para las varias clases de arquitectura.”
No debe olvidarse que también los pintores y los escultores eran reconocidos como buenos masones, tales como cortadores de piedra, fabricantes de ladrillos, carpinteros, ensambladores, constructores de tiendas y un vasto número de artesanos que no puedo nombrar, y que trabajaban de acuerdo a la Geometría y las Reglas de la Construcción; pero ninguno desde Hiram Abif ha sido reconocido por dominar todas las partes de la masonería.
Si podemos asegurar que para la nueva clase de masones especulativos, al menos los carpinteros eran vistos como pertenecientes a la esfera de la masonería geométrica,  no es sorprendente que en la historia legendaria de los masones aparezcan historias relacionadas con oficios aliados.
En las Constituciones de 1723 se lee lo siguiente:
“Noé el noveno desde Seth, recibió la orden de Dios para construir una enorme Arca, toda de madera, ciertamente fabricada con Geometría y de acuerdo a las Reglas de la masonería.
Noé y sus tres hijos, Jafet, Sem y Jam, todos masones verdaderos, trajeron con ellos tras el Diluvio las tradiciones y artes de los antediluvianos ( sic)…”
La historia de cómo aquellas “tradiciones y artes” fueron transmitidas, también se relataba en la edición de 1722 de las Constituciones así que esto fue meramente una amplificación del relato.

Que la historia de Noé y su familia en la construcción del Arca estaba especialmente conectada con el oficio de los carpinteros medievales, esta subrayado por dos cosas:
La primera fue revelada en el libro de Jasper Ridsley- donde reproduce cuatro pinturas murales del siglo 16 ( 1545) que se descubrieron en el Carpenter Hall durante la mitad del siglo 19 en ocasión de su restauración
La primera de esas pinturas muestran al Patriarca Noe orando ante el Altísimo con su tocado removido en tanto sus tres hijos trabajan en la nave ( y se nota también una escalera que lleva hasta la gloria del Señor, lo que recuerda al cuadro de Dibujos del primer grado).
Esto, que se halla en las paredes del sitio oficial de reunión de los Carpinteros de Londres, confirma la asociación de oficios. Y ahora se  verá alguna otra conexión.
El segundo hecho concierne a la elección de roles en los Ciclos de Misterios que se celebraban en muchos poblados de Inglaterra desde el siglo 14 al 16.
Se sabe que en Chester, Newcastle y en York la representación de Noé era reclamada por los Carpinteros de Ribera porque estuvieron involucrados en la construcción de un casco de madera, publicitando sus habilidades.

Los Carpinteros de York y Chester escenificaban la Resurrección. En esa representación, Cristo se elevaba desde un ataúd de madera en el cual se suponía había sido depositado en la tumba.
El vínculo entre ese incidente y la historia bien conocida por nosotros como francmasones del tercer grado, no requiere de ningún comentario especial si tenemos en cuenta algunos tapices de piso muy antiguos.

Sin embargo esa no es toda la evidencia con que contamos. Hay al menos tres asuntos adicionales que ameritan nuestra atención.
El siguiente factor en común entre los dos oficios es la elección de un patrón común. Y es la Virgen María, madre de Jesús.
Para los masones, la elección aparece como evidente.
Jesús era la piedra angular del Templo y la clave de su arco. María era simbólicamente conocida como “templo” del cual la gloria del Señor emergió y por tanto como madre de Jesús era natural que fuera elegida por quienes hacían surgir formas de las piedras.
A ella también se referían los escritores medievales como “una torre”, símbolo que aparece en el escudo de armas de los constructores, apoyando ese vínculo.
Para los Carpinteros, no menos importante que María ( a la vez esposa de un carpintero y madre de Jesús  que habría servido como aprendiz y entrenado en ese arte) era José, haciendo que su elección como Patrón de los obreros de la madera fuera absolutamente obvia.
Así otra de las pinturas Tudor en el Hall de los Carpinteros, muestra a María (sin halo), a Jesús como un niño aprendiz (con halo) practicando con piezas de madera y a José como Maestro Carpintero con sombrero, vara, túnica y guantes ataviado tal como un Maestro de los masones de la piedra de la época.
Que el Maestro y Vigilantes de la Compañía de Carpinteros usaban tales sombreros se revela en una de las fotografías de Jasper Ridley mostrando una cabeza real algo desgastada del período Tudor.
Cuando además se tiene que había una dedicación patronal común de los dos oficios que mantenían los mismos días santos ( o festivos, cuando los aprendices eran liberados de su trabajo) y las mismas tradiciones religiosas y legendarias, la conexión entre Masones y Carpinteros aparece con mas fuerza aún.
Hay mas aún: las guildas tenían patrones secundarios que también eran santos y sus representaciones teatrales particulares eran presentadas incluso antes del día de Corpus Christi.
Los masones tenían como patronos a los dos San Juan, en tanto que los Carpinteros honraban además a San Lorenzo.
Jasper Ridley nos informa que la elección de un Maestro Carpintero se realizaba originalmente el día de San Lorenzo, cuando además se representaba el misterio de ese santo.
No es posible hacer aquí una descripción completa de la historia de estos personajes sino de uno de los intrigantes hechos simbólicos:  que antes de ser muerto, Lorenzo fue atado a una parrilla cuadrada ( la misma forma del Palacio de Felipe II en el Escorial de Madrid dedicado al santo), y que la gestualidad adoptada en esas representaciones están basadas en escuadras.
Así, cuando el santo se yergue ante sus acusadores, tenía los brazos en jarra, o sea, las manos sobre las caderas y los brazos en ángulos rectos al cuerpo, y al dar asentimiento a cualquier cuestión extendía su brazo derecho al frente  formando un ángulo recto a su cuerpo.
Hoy en día, los francmasones actuales dan su asentimiento a cualquier asunto en esta forma.
Este antiguo uso de los carpintero ha sido  “retenido” en al sistema especulativo masónico.
Por tanto, parecería que desde el principio del desarrollo de nuestro ritual y leyenda desde los días de la primera Gran Logia de Londres de 1717, se contaba con una doble fuente de material a la cual se recurrió.

Los hermanos que diseñaron las ceremonias que llegarían a ser el patrón para la práctica en Inglaterra del siglo 18, pudieron aprovechar no solo los ecos tradicionales que podían conectar el nuevo oficio con el de los canteros, sino también con los obreros de la madera, los carpinteros.
¿Qué mas natural entonces que en la formación de nuestra práctica masónica del siglo 18 aparecieran dos leyendas referidas a los fundamentos de la historia bíblica?

jueves, 2 de febrero de 2012

El nacimiento del escocismo.Parte IV y última

Próxima entrada de La Imprenta de Benjamín: domingo 12 de febrero
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Aquí, la cuarta y última entrega de El nacimiento del escocismo.
Las anteriores fueron publicadas en este blog, los días  5/06/2011; 19/06/2011 y 26/06/2011.
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Las notas, referencias bibliográficas y la lista de miembros de las logias escocesas anteriores a 1717, pueden consultarse en la página del Círculo de Estudios del Rito Francés Roettiers de Montaleau  y de la Biblioteca masónica www.masoniclib.com.
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Título original
 
EL NACIMIENTO DEL ESCOCISMO.

LOUIS TRÉBUCHET. (GL de Francia)
Título original: La naissance de l´ecossisme.

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Aparición del tercer grado y de los grados escoceses.

En una serie de artículos desde 1992 a 1994, Roger Dachez trató en detalle la aparición del tercer grado (129)
Allí, una vez mas, dejó abiertas las pistas, sugeridas por el manuscrito de tono muy escocés, Sloane 3329 (130) y el manuscrito irlandés Trinity College. (131)
Todos los historiadores coinciden en el hecho de que la Gran Logia de Londres de 1717 y las Constituciones de 1723 no conocían el tercer grado.
Las Obligaciones de un francmasón que incluyeron, citaban a los compañeros (Fellows) en plural y al Maestro en singular, reservando ese apelativo para el Maestro de logia (132).

La tercera parte de las Constituciones, los reglamentos generales debidos a George Payne, continúan hasta la descripción de las reuniones trimestrales de la Gran Logia en las cuales se estipulaban: “los Aprendices no deben ser recibidos Maestros y Compañeros (Fellow-craft) mas que en esa ocasión, salvo dispensa (133).
Esos dos apelativos fueron combinados por la Gran Logia de Londres, y no es lo mismo en la mayor parte de las logias de Escocia del siglo XVIII, con la notable excepción de Aberdeen. No es cuestión aquí de grado ni de ritual ni de palabra, sino de apelativo y de estatus.
El estatus del Maestro es el de Compañero (fellow of craft) y son perfectamente distintos y las dos palabras no son en absoluto equivalentes.
Entonces, ¿porqué desde un siglo, se toman el trabajo de utilizar dos palabras diferentes, separadas o en conjunto, ligadas por “o” o por “y”, si significan la misma cosa.?
Por ejemplo el acta de la admisión de Sir Patrick Hume of Polwarth, uno de los raros no operativos recibidos maestros, menciona :”fue admitido fellow of craft (and master)    (y maestro) de esta logia “( 134).
¿Porqué el secretario de la Mary´s Chapel se tomaría el trabajo de mencionar “ y Maestro” entre paréntesis después de “Compañero de Oficio”, si las dos palabras tenían significados idénticos?
Los Antiguos Cargos incluídos en las actas de la logia Aitchison´s Haven de 1666 o las de la logia de Kilwinning, el manuscrito Edimburgo-Kilwinning, utilizan una expresión que no da lugar a duda alguna: “Estos son los Cargos que en general deben respetar (both) Maestros y Compañeros” (135), son los deberes que deben respetar a la vez los Maestros y los Compañeros para Aitchison´s Haven y : “Estos son los Cargos en general que deben guardar a la vez los masones Maestros y Fellows” (136) en Kilwinning.
La utilización de la palabra “a la vez “(both) implica en inglés la asociación de dos entidades distintas.
Siguen en otros sitios con deberes singulares y particulares para Maestros y Compañeros, que se aplican a veces a los dos grupos, a veces a uno de los dos, por ejemplo “ que ningún maestro acepte un trabajo en condiciones que no parezcan razonables, de forma que el Señor sea justamente servido y que el maestro viva honestamente y pague a sus compañeros (fellows), justamente como lo exige el oficio”(137)
En la mayor parte de las logias escocesas, la admisión a la maestría es asunto de la corporación y no de la logia, salvo en el caso que corporación y logia estén confundidas como fue el caso de Dundee.
La sólida argumentación de David Murray Lyon sobre este asunto (138) muestra por otra parte que era indispensable que el candidato hubiera sido previamente aceptado por la logia como Compañero de Oficio antes de poder ser candidato para presentar una obra maestra (Ensayo) ante la Corporación para el acceso a la maestría.

Es interesante notar que al fin del siglo, en 1695, los Maestros de Hamilton se establecieron en una Corporación (139) que será confundida con la logia.
De igual forma, todo a lo largo del siglo XVII, y ante las dificultades que conoció la logia Mary´s Chapel con ciertos compañeros, lo que condujo a la creación de la Journeymen Lodge de Edimburgo en 1709 (140), solo los Maestros y no los Compañeros de Oficio tendrán el derecho de votar para la elección del Vigilante de la logia (141).
Aparece entonces como innegable que el estatus del Maestro era distinto del de Compañero de Oficio.
Hay numerosas actas que muestran que en Escocia muchos Maestros en cada logia, elegían cada año un Vigilante y en algunos casos un Maestro de Logia.

A comienzos del siglo XVIII solamente circulaban manuscritos concernientes a rituales y grados.
El más antiguo es escocés, el manuscrito de Edimburgo (142), que menciona la fecha de 1696 y el nombre de la logia de Kilwinning.
Dos manuscritos posteriores son muy similares, Chetwode Crowley (1700) (143) y Kevan (1714) (144), y como ha señalado Harry carr, corresponden presumiblemente a la práctica de la logia escocesa de Haughfoot donde el libro de actas se abre abruptamente en la página 2  en algunas líneas muy cercanas al fin del manuscrito de Edimburgo, como si se hubiera querido proteger los secretos del ritual con la eliminación de la primera página.(145)
Esos tres manuscritos describan dos grados: el de Aprendiz, con el signo que conocemos y el de Compañero (fellow craft) o de maestro, con los cinco puntos del compañonaje (fellowship) y el toque (grip).
Así es que en cada grado se le da al recipiendario una palabra. Esas palabras, las mismas que las nuestras actuales de los dos primeros grados, no son citadas en todas las cartas de los manuscritos de los archivos de Edimburgo, pero lo son globalmente, en el Chetwode Crowley y el Kevan, y esos tres manuscritos indican los versículos de la Biblia de donde se extrajeron.

El manuscrito Sloane 3329, que el Departamento de Manuscritos del Museo Británico ha fechado en los alrededores de 1700, es sensiblemente diferente, no tanto en los términos usados, que muestran bien su origen escocés, sino en el estilo de los grados.
Se describe un toque (grip) diferente para el Compañero y el Maestro, semejantes a los conocidos hoy, con:“una logia justa y perfecta es la de dos aprendices, dos compañeros y dos maestros, mas o menos, uno mas, mas alegre, lo menos costoso es lo mejor…”  y se concluye por el saludo del Muy Venerable, de los Maestros y de los Compañeros de la logia, así “ que tienen otra que se llama la Palabra del Maestro y es Mahabyn que siempre se da en dos palabras y de pié, aproximándose, pecho contra pecho, el interior de sus rodillas juntas, el toque de los maestros en sus manos derechas y el extremo de los dedos de sus manos izquierdas sosteniendo firmemente la columna vertebral del otro, se tienen en tal postura y en ese momento se murmuran a los oídos, uno un Maha y el otro un Byn”.
Así es que más de una década antes de la creación de la Gran Logia de Londres, las logias del tipo escocés conocían los tres grados, con la transmisión de la palabra del Maestro, muy cercana a la nuestra. ¿Conocerían la leyenda de Hiram?.
No sabemos nada, pero podemos notar que el arquitecto Hiram aparece en el manuscrito Dumfries Num 4146 contemporáneo o ligeramente posterior, justamente como propiedad de esa logia tan particular de Dumfries de la cual hablamos antes.
El manuscrito del Trinity College de Dublin, que lleva la fecha manuscrita de 1711, es aún mas claro: “una logia plena y perfecta es de tres maestros, tres compañeros ( fellows craftsmen) y tres aprendices” y “El signo de los Maestros es columna vertebral, la palabra, matchspin. El signo del Compañero (fellow craftsmen) es falange y nudillos, la palabra Jachquin. El signo del Aprendiz es nudillos, la palabra Boaz,  donde esta hueco”
Así que las logias irlandesas tenían, como señaló Philip Crossle (147) un rito en tres grados antes del advenimiento de la Gran Logia de Londres.
¿Dónde encontraremos esas logias de tipo escocés o irlandés que practicaran un tercer grado?
En todo caso no sería en las logias tradicionales de Escocia: Mary´s Chapel de Edimburgo lo descubre en 1738  (148), las logias de Aitchison´s Haven, Haughfoot, Dunblane, Peebles en 1760  (149) ni tampoco las que dependían de la Gran Logia de Londres que adoptaron en forma oficial el tercer grado en 1738  (150)

Por el contrario, las podemos hallar en Francia (151) y en Europa (152) donde los jacobitas escoceses e irlandeses habían fundado con sus amigos las logias que conocían el tercer grado: en 1737 Derwentwater, Gran Maestre de la Muy Antigua y Muy Ilustre Sociedad de los Francmasones del Reino de Francia, envía al Barón Carl Fredick Scheffer (153) un poder para Suecia de “hacer francmasones y de nombrar Maestros y Vigilantes de las logias que constituyera…. (154)

Mas allá del tercer grado en sí, Alain Berheim presenta el testimonio de Hugo O´Kelly que en 1738 era el Venerable de una logia irlandesa, ante la Inquisición de Lisboa reconociendo la existencia de dos grados adicionales al de Maestro masón (155)

En 1744 se publica en Bruselas “La Francmaconnerie”(156) de donde se puede extraer esta frase: “La ignorancia es general tanto que la mayor parte de los Maestros y Vigilantes no saben que la masonería se compone de siete grados y que la logia misma decide disimularlo el 11 de diciembre de 1743, diciendo que no debían considerarse a los masones del cuarto, es decir a los Maestros Escoceses, mas que como simples Aprendices y Compañeros
Y en efecto, en esos días después de la muerte del Duque de Antin y a la víspera de la elección a la Gran Maestría del Conde de Clermont (157), el Marqués de la Cour de Balleroy, Diputado del Duque de Antín, firmó (158) los Reglamentos Generales extraídos de los antiguos registros de logias para uso de las de Francia (159).
Esos reglamentos donde 19 artículos sobre 20 están tomados de las Constituciones de Anderson (160) contienen en el 20 las pretensiones y las exigencias del Maestro Escocés, “no encontrándose traza alguna en los antiguos archivos y costumbres de las logias repartidas por la superficie de la tierra” y determina que ellos : “no serían considerados por los hermanos como otra cosa que Aprendices y Compañeros debiendo llevar su vestimenta sin marca alguna que los distinga”.

Como lo destaca Claude Guérillot (161), los redactores de esos reglamentos no conocían y no reconocían como legítimos nada mas que a los dos primeros grados.
Todo parece suceder como si: de las dos corrientes concurrentes de la francmasonería en Francia, una, alrededor del Duque de Antin, recorría el lento pasaje de la francmasonería inglesa de Anderson hacia el tercer grado, y la otra, alrededor de Derwentwater y Mc Leane que le había precedido a grandes pasos hacia el escocismo.

Francmasonería escocesa y las redes jacobitas.

¿Había una voluntad política de los Estuardo detrás de ese movimiento?
Jean-Emile Daruty apoyándose en Thory y Mackey lo evoca prudentemente:

 “ así es revisado: en 1650 las alegorías del Maestro, tendían según algunos autores a recordar la memoria de Carlos I  decapitado el 30 de enero de 1649  y donde los masones de Inglaterra y Escocia sobre todo, los partidarios de los Estuardo trabajaban en secreto para restaurar el trono a favor de Carlos II. (162)

Pierre Chevallier es aún mas prudente al tratar el asunto, todo estimando que “ el origen jacobita de la orden no es sencillo de descartar”
Cita una nota manuscrita acerca de una carta de 1737 de un contemporáneo, Bertin de Rocheret “ sociedad antigua de Inglaterra… introducida en Francia a instancia del rey Jacobo II en 1689 (163)

René Le Forestier atribuye a otro contemporáneo, Paul Rapin de Thoyras, un estudio publicado por su hijo (164) en 1739: “Jacobo II había establecido los grados masónicos superiores para recompensar la lealtad de los escoceses que habían sido sus fieles partidarios; y por eso los altos grados llevan ese título genérico….”

Un objetivo idéntico puede percibirse en otra asociación denominada la Orden de San Andrés, que fue creada por la misma época en Escocia. Pero Jacobo ya estaba muerto para entonces (en 1701), y no se vuelve a hablar de ella hasta 1725, año donde se expande por todas partes  (165)
André Kervella ha rescatado, con Philippe Lestienne, dos manuscritos en los archivos de Quimper y de Poitiers (166) que nos permiten retomar el razonamiento pero a la inversa.
La Sublime Orden de los Caballeros Elegidos descripta en esos manuscritos de 1750 posee un ritual y un catecismo de Caballero Kadosh y comprende su parte templaria que es de un extremo al otro idéntico al que será impreso en París en 1781 por Vincent Labady (167)
Contienen los fundamentos de los grados de Elegidos, así como todos los ingredientes del grado de Caballero Kadosh de hoy día.
El manuscrito de Quimper de 1750 proporciona una lista de 6 Grandes Oficiales y de 24 Grandes Maestres o Diputados Gran Maestre Regionales en Francia, Europa y en las Antillas.
Es ciertamente una (¿mala?) copia de ese documento que Gustave Bord tuvo entre sus manos cuando detalló el Estado Mayor de la FM jacobita en 1760 (168) porque son idénticos los errores de fecha y de retransmisión.
Habida cuenta de los retrasos en las comunicaciones y el desplazamiento en el mundo durante la primera mitad del siglo XVIII, ¿cuánto tiempo se requería para formar una red?.
En todo caso esa red tenía conexiones con las de La Parfaite, logia escocesa de Burdeos..
Se hallan los nombres de Goudal de la Goudalie, Fontanilhes, Vieres, Zollicoffres presentes también en los documentos Sharp que ilustran las ramificaciones de la actividad escocesa de Burdeos (169)

Algunos hermanos citados en esa lista tienen vinculaciones documentadas con las redes jacobitas: James Stuart (170), Jean-Baptiste Pinot de la Gaudinays (171), ciertos oficiales de la lista pudieron haber sido compañeros de armas de los oficiales de la Brigada Irlandesa en Fontenoy (172) o mas tarde, tras el desastre de Culloden junto a Bonnie principe Charlie (173) en Lawfeld (174).

Pero, nos encontramos sobretodo en esa lista a los nombres del Conde de la Tour du Pin y del Baron de Vegesack, que confirmó a posteriori la declaración citada y puesta en duda por René Le Forestier (175):
“Vegesack pretendía haber sido admitido en 1749 en la Orden del Temple… por el Conde de la Tour du Pin, provincial de Auvernia”, lo que permite dar un poco mas de crédito a los que le Forestier califica de “flagrante impostura” (176), la evocación por Carl Gotthelf von Hund de su recepción en una Orden Templaria por el Conde de Kilmarnock y de otras personalidades jacobitas (177) durante su estancia de nueve meses en París en 1743 (178)
Lo cierto es que esa Orden Sublime de Caballeros Elegidos desapareció en la naturaleza para 1752.
En lo que concierne a su capitulo de Poitiers, el 18 de enero de 1752, los fondos son  “cedidos a la logia de masones Ecoss? y BL?  para sus necesidades… (179)
¿Será una coincidencia si ese año el fracaso del complot de Elibank (180) hace sonar el toque de difuntos a las últimas esperanzas de la dinastía Estuardo?

El Conde de Clermont, Gran Maestre de la Gran Logia de Francia, afirma en una carta de 1767 al Marques de Gages que Jacobo II, el principe Eduardo y aún el antiguo pretendiente eran francmasones: “ .. no es mas que por consideración a la memoria de nuestro querido H….. el príncipe Edouart, que esta logia subsiste aún en nuestro Oriant “(181) y André Kervella cita una carta de 1722 de ese mismo Jacobo III anunciando su intención de crear una nueva orden de caballería (182).
Así, ninguna prueba es definitiva, pero algunos elementos convergentes dejan pensar que la Orden Sublime de los Caballeros Elegidos podría ser el fruto de esa decisión.

Ese sería el “eslabón perdido” que justificaría que nuestra francmasonería se denomine “escocesa”, no a título de la Gran Logia de Escocia de 1736 (183), sino a título de esos gentilhombres escoceses, irlandeses, y aún ingleses exiliados en Europa al servicio de la dinastía escocesa de los Estuardo.
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